jueves, 8 de marzo de 2018

Viernes...

Hola a tod@s! 
Mañana firmo un contrato, otro más de los muchos que se rubrican durante la vida. Mas este parece tener tintes especiales, primero tuve que demostrar con papeles que estoy en plena forma para hacerlo; hubo incluso que rebuscar en los archivos de la vida. Más tarde se lo fui diciendo a los incondicionales y la mayoría mostraron palmario interés por asistir a la firma… pero, “sí es sólo una firma” pensé. Entonces fue creciendo el entusiasmo, muchos compraron billetes para vuelos sobre algún océano, otros tuvieron la suerte de la cercanía pero reservaron el día en sus teléfonos. Algunos se enfadaron consigo mismo por la imposibilidad de mover compromisos anteriores y perderse el instante del rubricado. Todo esto ha pasado en los últimos meses mientras que los días dejaron de llamarse lunes, martes… para formar parte de una cuenta atrás. ¡Una locura! 
Me dijeron que no podía ir ataviado de cualquier manera ese día y se crearon grupos de whatsapp para discutir sobre estilismos y tendencias. En algún momento alguien promocionó una lista colaborativa en spotify para buscar la música que se bailaría. ¿Bailar? pero, “sí es sólo firmar”, volví a pensar, esta vez tímidamente. Me dejé llevar por el frenesí intentando frenar la apoteosis… tanto fue así que hasta padecí una gastroenteritis que dulcifiqué con una faringitis y bajé cinco kilos, yo que soy, de base, escuálido. “No sigas bajando de peso”, me dijeron unos. “Quedarás horrible en las fotos”, vaticinaron otros. ¿Fotos? Sí, fotos y vídeos, parece que todo hay que documentarlo según la tradición. Pero “si sólo es una…” y dejé de pensarlo por temor a alguna represaría colectiva. Fue el momento en que me volqué en los preparativos… que si una cena, que si canciones, que si discursos y la pléyade se quedó corta. 
Mañana firmo un contrato, otro más de los muchos que se rubrican durante la vida. Mas este parece tener tintes especiales, mañana mi pareja y yo quedaremos amparados por la ley que creamos los humanos. Ninguno irá vestido de “novia” y es la respuesta que doy al “jocoso” comentario de una investigadora, supuestamente progresista, de mi instituto. Los dos seguiremos siendo hombres, pero unidos según lo que dicta la legalidad vigente. Mañana firmo un contrato, y estoy felizmente despierto desde las cinco de la mañana por ello. 
Os quiero, 
Ed.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

En todos los lugares hay imbéciles y la ciencia no es escapa, aún hay personas que piensan en los homosexuales replicando el sistema binario hombre-mujer. Lo peor es que sean científicos los que lo hagan. Supuestamente son personas que están en la frontera del conocimiento pero algunas, como esa investigadora, le falla las neuronas de vez en cuando. Felicitaciones.

Anónimo dijo...

Felicitaciones hermano!

Anónimo dijo...

Felicitaciones y sobre el comentario "jocoso" a los imbéciles ni agua.

Anónimo dijo...

Felicidades!!!

Anónimo dijo...

No entedía nada jaja. Enhorabuena.

Anónimo dijo...

Que te quiten lo bailao brother. Felicidades.

LILO dijo...

Allí estaremos, en el ensayo, en la firma, en la ceremonia, en los bailes, y mucho antes y mucho después. Felicidades!

Anónimo dijo...

Se armó la gozadera.