Hola a tod@s!
Ya
se va acabando la semana, de hecho algunos dicen que la semana empieza el
domingo por lo que ya se extingue el primer día de la otra semana. La verdad es
que no pensé escribir mi Viernes, estaba agotado… mil reuniones, algunas poco
productivas, otras totalmente estériles y un par de ellas con noticias que más
tarde vendrán. Proyectos, alegaciones, mi laboratorio que va a mil, una tesis
dirigida que se traba, se destraba, se enreda y no avanza. Amigos que dicen
quererme con el mazo en mi cabeza, otros que quieren apoyos y a cambio brindan
desvelos. Hasta un mareo se ha presentado, cuestión que achaco al es-trés que
pasa por cuatro e intento que no llegue a cinco. Mi semana fue así, de
sobresalto a sobresalto, una de cal con mucha arena, dos de arena con migas de
cal. Y llegaron los días de descanso y con ellos la revisión de un proyecto que
escribo con químicos, también la desgana, las preguntas y sus “porqués”. Pero
el domingo vino a salvarme. Un amigo me escribe, me invita a ver la Compañía Nacional
de Danza, el espectáculo ya lo había visto, estuve en el estreno y escribí una
reseña para la revista con la que colaboro… me había encantado. Dejé todo, me
fui a la Zarzuela y allí se me arregló la semana o el fin de semana o las
últimas horas del domingo. Al final del programa, improvisan, sacan a bailar a
unos pocos del público, yo entre ellos, y bailé, bailé muchísimo, me divertí,
sentí la droga de un escenario. ¿Jordi me hiciste alguna foto? Volví a casa con
otro ánimo, otra cara, y ahora sí puedo escribir mi Viernes, puedo criticar la
venta de un Bacon por 106 millones, decir que el cuadro se va a Catar, prever
que tendremos que vestir chilabas en un futuro cercano si queremos ver arte
pictórico. Protestar porque la Infanta sigue sin ser imputada y aclarar que una
cosa es saludar a la Reina, algo que hice recientemente, y otra muy diferente
es negar evidencias. Trinar de rabia por escuchar que el Prestige no tiene
culpables. Decir que “Jazmine”, la última de Allen, pudo llamarse el monólogo
de Cate y la peli da fragancia de Óscar a Blanchett. Elogiar que Obama,
finalmente, ha hecho su papel de Premio Nobel de La Paz, aunque seguro que más
de un@ le sacará punta al hecho y me encantaría verl@s en una posición de
decisión. Poner el tono triste y decir que Frederick Sanger ha muerto, el mismo
que nos dijo cómo era la insulina y tiempo después supo secuenciar el material
genético, uno de los cuatro que ha hecho doblete en el premio sueco, el
mismísimo que, según un amigo que trabajó con él, amaba aquello de construir maquetas
de barcos y se pringaba de radiactividad todos los días en su laboratorio. Y
todo esto lo he podido escribir porque bailé en un escenario, porque solté las
riendas y os cuento un secreto, cuando estoy solo pongo música y bailo, me encanta
bailar, algun@ me ha tildado de loco, otr@s se ríen, la mayoría no lo entiende…
me da igual, ell@s se lo pierden.
Os quiero,
Ed.
PD: Babbo gracias dobles, Lissette, Chris y Ceci felicitaciones por vuestros cumpleaños. A tod@s aquí os dejo los links sobre lo que publiqué sobre la Compañía Nacional de Danza y sobre Jazmine.
http://www.ociogay.com/2013/11/17/la-compania-nacional-de-danza-borra-la-sombra-de-duato/
http://www.ociogay.com/2013/11/18/blue-jasmine-woody-allen-explora-el-desconsuelo-en-la-carne-de-cate-blanchett/