sábado, 30 de abril de 2011

Viernes español




Hola a tod@s!
Luego del desquicio de la semana santa, Madrid vuelve a “enfrentarse” con otro desorden que es el puente de mayo y yo recuerdo a un amigo alemán, del gremio científico, que me decía: “aquí es imposible realizar un proyecto, cada dos por tres se detiene el país por un puente y el experimento con él”. Sálvame dios (y hablo del dios ateo que reniega de la semana santa, claro está) de decir que no me gustan las vacaciones, simplemente lo que no me parece bien son los parones en masa que detienen el país. ¿No sería mejor otorgar esos “días festivos” como vacaciones que los trabajadores puedan disfrutar en días que ellos seleccionen? De esta manera evitaríamos las salidas borregas que tanto descalabro traen consigo. En fin, sé que hablo de imposibles, esto como el bocadillo de las doce son esencias difíciles de cambiar. Lo que sí se podría cambiar es la dirección de los recortes que se nos vienen encima, todo el mundo sabe que en breve la sanidad española dejará ser lo que es, que habrá más despidos y los recortes sociales dejarán sin sentido la palabra “social”. Sin embargo, ¿por qué no “podamos” otras cosas? La lista es larga: el senado, esa institución que ni pincha ni corta y mantiene a doscientos sesenta y seis individuos con escasísimo contenido de trabajo, muchos países funcionan sin él y en otros como EEUU cincuenta hacen toda la labor. Seguimos, los coches oficiales… en España hay más coches oficiales que en el país del Tío Sam, sencillamente increíble. Otros gastos insoportables son los sueldos vitalicios de los “padres de la patria”, las tarjetas VISA oficiales, las nóminas de los alcaldes, los cargos con funciones duplicadas y un largo etcétera. También pondría una alarma en el cuerpo diplomático, en este país se gasta más en la diplomacia que en el Reino Unido y Alemania. ¿Cómo es posible? Está claro que en muchos lugares más allá de un embajador y un cónsul es tirar el dinero pero se sigue haciendo. ¿Alguien toma nota? En otra cuerda, y menos mal que existen otras cuerdas, por Madrid el Teatro Real re-estrena la polémica ópera “El Rey Roger” y las críticas son dispares, es posible que la capital use demasiada laca y esto imposibilita entender conceptos nuevos. También nos visita el Ballet Real de Suecia con dos coreografías una de Mats Ek y otra de Christian Spuck. Siempre he pensado que ver danzar es un placer, el hombre danza para expresar algo muy profundo que la palabra no es capaz de describir y con ellos me reafirmo en mis pensamientos. Por otra parte, recomiendo “Código Fuente”, si no me he equivocado, está es quizá la película con peor tráiler de la historia. Con todos los elementos necesarios para crear una cursilada, enumero: un avance tecnológico que involucra la física cuántica, un chico guapo que puede salvar vidas, una trama política y una chica mona que quiere ser salvada, el guionista decide ser serio y construye una estructura sólida que nos mantiene despierto sin la sospecha de que nos están tomando el pelo. Por si esto fuera poco, las actuaciones son creíbles, los parlamentos naturales y no nos atiborran de efectos especiales… ¿no ha quedado claro que me gustó?
Y para terminar este Viernes de una semana en la que la poetiza Fina García Manruz recibió el premio de Poesía Reina Sofía y con ello se rinde homenaje a todo un grupo de intelectuales de la isla que se hicieron llamar “Orígenes”, semana que nos confirma aquello de que “Occidente pierde los principios y se mueve por interés”, durante la cual ETA ha dado un paso algo más firme pero el terrorismo reaparece en el mundo árabe, en la que pudimos ver, con alegría, que Ana Pastor sigue apostando por preguntar y preguntar hasta que el político conteste… yo termino con un pedido muy simple: ¿Alguien me recomienda un libro (nuevo) para leer?
Os quiero, Ed.

PD: Argeo gracias por la información… de la “boda” no hablé porque me parece absurdo.

viernes, 22 de abril de 2011

Viernes con torrijas y sin santos



Hola a tod@s!
Ha llegado la semana santa y en España esto es sinónimo de dos cosas: éxodo y mal tiempo. Increíblemente, sea cual sea el fin de semana escogido por “los cálculos providenciales” llueve, llueve y llueve. Todo parece indicar que si ese dios que adoran existe, tiene clara tendencias ateas y, como a mí, no le parece nada bien las demostraciones medievales de veneración y castigos. Por otra parte, amén de las procesiones varias, el español necesita cambiar de sitio durante estos días… cosa que luego de tanto tiempo por estos lares, sigo sin entender. Si saben que todo estará repleto, que las carreteras se transforman en sumideros imposibles y, además, lloverá… ¿Por qué tienen que coger el coche y trasladarse de sitio por cuatro días? En fin, las tradiciones superan el menos común de los sentidos, es decir el sentido común. Está demás decir que a mí nadie me mueve de Madrid en semana santa y aquí disfruto de un clima inestable y una ciudad desierta. Es entonces momento de comprobar que el desatino de un director de teatro, con nombre y fama, puede echar por tierra o incluso sepultar a un texto que ha sido génesis de muchas cosas en este género. Hablo de “Woyzeck” que estos días se pone en el Teatro María Guerrero de Madrid. Bastará decir que fueron muchas las ocasiones en que miré el reloj para calcular el tiempo restante de tortura por sufrir. Esta obra inconclusa de Büchner, el médico y científico que revolucionó el teatro con menos de 24 años, es un auténtico fracaso en manos de Vera, el director que tantas buenas críticas ha cosechado. En un tono parecido está la película chilena “La vida de los peces”… insoportable. A pesar de jugar con una buena idea, aunque ya vista, y utilizar una cámara que sugiere que los personajes están dentro de una pecera, el guionista agota todo lo que tiene que decir en los primeros veinte minutos… horror, quedan aún más de una hora para repetir el mismo cuento. Sin embargo, por aquello de mantener el equilibrio, “Happythankyoumoreplease" es una sorpresa agradable. Al principio se muestra como otra película sobre historias medio-cruzadas que ocurren en New York, pero luego nos entra con suavidad un guión más que bien estructurado con personajes creíbles que nos hace salir de la sala con una sonrisa. Estas cosas se agradecen en tiempos donde vemos a Aznar despotricar de su propio país y defender la imagen de Gadafi o lo que es peor, tener que soportar el cinismo de los Castros proponiendo “reformas” tardías y sucesiones mal planteadas a su feudo. De cualquier manera, no debemos olvidar que la vida es un evento único y por lo tanto se debe disfrutar a pesar de los pesares… es entonces que os invito a pasear por vuestras ciudades, intentar por algunos segundos observar sin juzgar, buscar una sonrisa interior y compartirla.
Os quiero,
Ed.
PD: ¡He logrado hacer torrijas! Me han quedado buenas. Sigo leyendo Solar y me he re-encontrado con una pareja de amigos de los tiempos de Genética (Martica y Racmar).

sábado, 16 de abril de 2011

Viernes ... de vuelta


Hola a tod@s! Luego de dos semanas intensas llenas de trabajo duro, alergia y mala respiración, esto último debido al asma que me visita cada primavera desde hace tres… tengo un tiempo para mi Viernes. Muchas cosas han pasado y hemos recordado. Google ha festejado el cumpleaños 122 de Chaplín y yo he recordado una anécdota que me contó su hija Geraldín hace algún tiempo… estaban ella, su madre y Chaplín en una galería disfrutando de una exposición, ellas rebosan entusiasmo por los cuadros pero Chaplín se mostraba tristón. Entonces Geraldín le preguntó: “¿No te gustan?”, su respuesta fue: “Mucho… nadie se ha dado cuenta que estoy aquí”. Acto seguido una anciana lo reconoció y minutos después tuvieron que salir del sitio con la ayuda de la policía… en el coche y mostrando su inmortal sonrisa susurró: “Aún se acuerdan de mí”. Y es que los genios que han probado la fama, la necesitan. También hemos recordado que hace 50 años un hombre dijo: “La tierra es azul” era un ruso (por aquel entonces soviético) que medía escasamente 1,69 y estaba metido en una cápsula. Cuentan que Yuri Gagarin hizo detener el coche que lo llevaba al pie del cohete con el objetivo de orinar, a partir de entonces todos los cosmonautas que salieron del cosmódromo Baikonur repitieron el ritual para tener buena suerte. Gagarin murió en extrañas circunstancias siendo aún muy joven y el hermetismo del telón de acero nunca nos permitirá saber la verdad sobre aquel chico que abandonó el planeta por algo más de una hora. Los “rusos” sacaron al hombre del planeta, luego los “americanos” pisaron la Luna. Sin embargo, la carrera espacial se bloqueó y hoy podemos transmitir grandes volúmenes de información de manera instantánea pero seguimos atrapados en el planeta ¿azul? El problema sigue siendo el mismo: la energía. Cambiando de cuerda, por España nos preocupa la economía ¿qué novedad? y Zapatero ha estado vendiendo nuestras riquezas a los chinos. Una vez más occidente olvida lo que hace aquel gobierno y las palabras “derechos humanos” son sólo eso: palabras. Evidentemente nos importan menos los “derechos” cuando tenemos las barbas en remojo con el vecino portugués en manos de la Merkel y el FMI. Mientras tanto dos debates han saltado desde Madrid. Por una parte, la Presidenta de la Comunidad propone un programa de bachillerato de excelencia donde se ponderará la enseñanza de ciencias a aquellos que tengan mayor rendimiento y por otra, el Alcalde de la ciudad anuncia su intención de limpiar las calles de mendigos. Esta vez y sin que sirva de precedente, estoy de acuerdo con ambos. Lo de promover una enseñanza de excelencia no es nada nuevo, este tipo de programa existe en muchos países y funciona bien. Sin irme a Suecia o Estados Unidos… en mi Cuba se instauró y funcionó. Es curioso como nadie se asombra cuando a los niños se les va seleccionando por sus aptitudes para entrar en clubes de fútbol, pero si hacemos lo mismo para las matemáticas ponen el grito en el cielo por aquello de promover el elitismo. Se equivocan, hoy por hoy lo que se promueve es la mediocridad y con ella el anumerismo que es una forma de incultura muy bien aceptada. Creo que deberíamos gritar horrorizados por ver como los padres permiten que sus hijos pierdan una semana de clases por hacer colas/filas para escuchar los gallos de un adolecente estúpido que lleva por nombre Justin Bieber, y no por iniciativas como esta. En cuanto a la “barrida” de indigentes de las calles madrileñas, el tema pone en evidencia nuestra profunda y bien arraigada hipocresía. Por una parte nos enervamos y elevamos la pancarta: “La calle es de todos” y por otra nos molesta que la entrada de la Ópera sea un dormitorio de mendigos o que un sin-casa tome nuestro portal como baño. En fin, somos humanos y por ende contradictorios. Y por hoy no os aburro más, me despido contento de saber que a Carlos Acosta, el bailarín cubano que triunfa en Londres, se le concede el premio nacional de danza que otorga la Isla de las Metáforas, que Almodóvar decide volver a la Academia de Cine Español y competirá en Cannes con su última película, que Penélope volverá a ponerse en manos de Woody Allen y que este sábado me reuniré con algunos amigos para disfrutar de esta alergia… digo primavera. Os quiero, Ed.

PD: Jabel, ¿me lees?

domingo, 3 de abril de 2011

Viernes de aullido...


Hola a tod@s! Me ha costado dejar la inercia de la inacción y sentarme a escribir un Viernes tardío, pero aquí estoy. Madrid se nubla luego de una semana de auténtico verano y el día, como buen domingo, invita a la reflexión.

“Vi las mejores mentes de mi generación destruidas por la locura, hambrientas, histéricas, desnudas, arrastrándose por las calles de los negros al amanecer, en busca de un colérico pinchazo”… Así empezó su “Aullido” (Howl) Allen Ginsberg allá por los años cincuenta del siglo pasado, con este poema intentó describir y entender a una generación que se perdía en su propia búsqueda. Aquellos se drogaban y alcoholizaban para erigir un mundo mejor, un sitio donde poder ser libres y dar riendas suelta a su creatividad… algunos sobrevivieron, otros se quedaron en el camino, muchos creen que mereció lo pena. En cambio hoy, las hordas de adolecentes, post-adolecentes y entrados-en-la-treintena-profunda se siguen drogando y alcoholizando cada fin de semana, eso sí, ni crean nada nuevo, ni destruyen lo establecido. Generaciones como la Beat, o incluso la que protagonizó la llamada Movida Madrileña, hicieron algo con el alcohol y las drogas, cambiaron el mundo, sacaron las palabras sexo, coño y polla de un armario demasiado personal y les dieron su significado real. ¿Qué hacen los de hoy? Todo esto viene a colación de una conversación que tuve con algunas de mis becarias… ante mi pregunta: ¿Qué sentido tiene drogarse y beber alcohol hasta el coma etílico cada fin de semana? su respuesta, confusa, fue: “Confraternizar, sentirse parte del grupo, pasarlo bien, poderlo contar luego… algo que hay que hacer para no quemar una etapa”. ¿Qué etapa? ¿Pasarlo bien o quemar hasta la última neurona en puro alcohol? Por lo general intento ser cuidadoso al comparar experiencias, una especie de freno se me activa cuando hablo de lo que pienso que es importante hacer o dejar de hacer. Sin embargo, creo que esto es una gran hipocresía que debemos dejar a un lado. Por ello digo claro que para “pasarlo bien” no hay que beberse la botella hasta el fondo, que es una soberana estupidez drogarse para confraternizar, que escuchar música clásica es sublime y preferible a los “mensajes” Mesiánicos de divas prefabricadas o los sonidos ensordecedores de las discotecas y que esta generación se está perdiendo en un camino hacia no sé dónde. De cualquier manera, sigo pensando que pueden cortar todas la flores pero será imposible detener la primavera… esta semana estuve tres días en París y uno de ellos me dirigí hacia la Ópera Garnier para comprar una entrada de última hora y ver el Coppelia de su compañía permanente. La función abría una pequeña temporada de ballet en el teatro y prometía el mejor elenco. Llegué al sitio temprano, me puse en la cola y una señora amablemente me explicó, en un francés muy pausado, el proceder en estos casos… poco después llegó una joven muy bella que, al ver como la señora me hablaba en la lengua de Moliere, he de decir que me estaba enterando del 30 por ciento de lo que decía, empezó hablarme también en francés… fue entonces cuando le rogué que, de ser posible, utilizara el inglés. Entonces estuvimos más de media hora hablando de ballet, de la coreografía que veríamos, de los bailarines clásicos, de la música que se usa… en un momento determinado la conversación se agotó y tras un breve silencio le dije: “thank you for your English”… fue entonces que me preguntó de dónde era y descubrimos que su pasaporte y mi nacionalidad eran la misma. Esta chica de sólo 23 años, nació en un pueblo pequeño de Cataluña, estudió danza desde pequeña, se licenció en Física y ahora hace su doctorado en la Sorbone… su familia nada tiene que ver con la alta cultura o con la ciencia. Su beca no supera los mil euros mensuales, sin embargo, ella busca entradas baratas para la ópera y el ballet todas las semanas. Conozco muy bien el discurso: “no es imprescindible haberse leído El principito o llorar con la muerte de Antinoo en las Memorias de Adriano para ser una buena persona” … y hasta puedo estar de acuerdo, pero hacerlo suma en vez de restar. Y así termino una semana en la que pasee por París, vi “Coppelia” en Garnier respirando ese aire especial que atesora este teatro, disfruté de “Luisa Miller” de Verdi en la Bastille, escuché la fabulosa quinta de Mahler en el Auditorio de la ciudad donde vivo, quedé con un amigo en el Arco del Triunfo pequeño, pasee por los Campos Elíseos y recomendé a todos ver “Howl” en el cine. Sí, disfruto de la cultura… prefiero gastarme el dinero en una entrada que beberme una copa en un sitio anónimo, sigo sin entender porque hay que estar hasta las 7 de la mañana en la calle vociferando y por todo esto no soy ni anormal ni esnobista. Os quiero, Ed.


PD: Ya sé que Zapatero no será candidato pero sobre esto hay muchos bytes en la red. Vlado y Juanjo bienvenidos a mis Viernes. Yoce tenemos que vernos. Glaría echo en falta tus comentarios. Angel gracias por tus emails. TA cualquier cosa que te diga sería poco. Roberto buen viaje y regresa pronto. Dani… otro cine nos espera esta semana.