sábado, 28 de marzo de 2009

Viernes

Hola a tod@s!
Hace poco hablaba con un par de colegas de profesión sobre la evolución, al final concluimos que evidentemente somos la cúspide de este proceso por las herramientas que hemos fabricado y no precisamente por la fuerza que tenemos. La conversación derivó en qué pasaría si una civilización extraterrestre nos encontrara, uno de mis compañeros apostaba porque nos destruiría… aquello derivó en unas risas durante la comida. No obstante a lo hilarante de la conversación algo me quedó dando vueltas. ¿Qué hemos hecho los hombres durante nuestra historia con las culturas más débiles? Destruirlas. Aún hoy, con todas las organizaciones mundiales, los buenos modales y el saber estar; somos incapaces de conectar plenamente con el diferente e incluso miramos por encima del hombro a quien manifiesta una forma distinta de pensar. Nos hemos inventado mecanismos para aparentar ser “humanos” y en muchos sitios hasta elegimos democráticamente nuestros líderes… sin embargo, ¿Por qué el poder nunca ha estado en manos del más inteligente? Algo nos falla y es que creo que al final somos meros destructores con ansias de aplastar…
Sigo en Madrid y la luz se va acercando, esta semana no he visto nada comentable. Para colmo tengo gripe. En el cine estrenan una de niñat@s musculad@s que se drogan y tienen sexo hasta con el gato, no me apetece verla.
Os quiero,
Ed.
PD: Paz, no me gusta La RegentaL, (n=1).

1 comentario:

Felipe dijo...

Ayer ví la película que mencionas "Mentiras y Gordas" de Albacete y Menkes. No iba con muchas ganas, pero me impresionó. Tiene su mensaje, la juventud está desideologizada, sin metas, sin valores y sin futuro. Viven el presente inmediato, a costa de fundir su vida en unos segundos de "speed". Las tonterias que somos capaces de hacer cuando te enamoras jodidamente... se multiplican con los efectos de la droga abundante y el sexo facil.