Viernes... poco santo

Hola a tod@s!
Luego de unos días donde, sin darnos cuenta, sufrimos algo parecido a un “jet lag” de una hora (y es que ese pequeño cambio de horario hace que nos despistemos más de lo habitual y en todos los sentidos), entramos en el período de adoración de pedazos de madera seguido de borracheras no todas etílicas: la semana santa española. El país sufre un parón impresionante que, luego de muchos años con el pasaporte de estos lares en mi bolsillo, sigo sin entender del todo y me reafirmo en su inutilidad. Por suerte, no todo el mundo se ha detenido para “celebrar” el calvario de Jesús… en la frontera entre Suiza y Francia siguen con lupa lo que sucede cuando se recrean las condiciones energéticas de milisegundos después del “big band”, finalmente y con un gran despliegue mediático se logró establecer flujos de protones con 3,5 TeV (mucha, pero mucha energía) haciéndolos chocar en algunos puntos. El objetivo es ampliar las fronteras de nuestra física, buscar el bosón Higgs (o lo que se puede entender como el éter moderno) y quizá crear pequeños huecos negros de gran inestabilidad. Sé que muchos pensarán que en tiempos de crisis no se debería “gastar” dinero en este tipo de experimentos que la mayoría de los contribuyentes no entienden… quizá dijeron lo mismo de Boole cuando le dio por establecer su álgebra que hoy es base de todo equipo eléctrico que usan los contribuyentes. Siguiendo con la energía y moviéndonos a España, el precio que pagaremos por calentarnos y cocinar será bastante más alto este mes, y todo esto a espera de la subida de impuestos que sazonará nuestro verano, momento en el cual si decidimos viajar a Estados Unidos nos encontraremos con unas medidas de seguridad más fuertes que incluyen interrogatorios extras a aquellos que tengan “pintas” o nombres con pedigrí terrorista. Definitivamente vivimos en un mundo que ha perdido los tornillos y para muestra el ataque al metro de Moscú. ¿Qué impulsa a una persona al suicidio para acabar con la vida de otros? ¿Llegar a extremos aumentará la seguridad? ¿No se necesitan otras medidas encaminadas a solucionar el problema en su raíz? Desde luego que etiquetar a las personas por su procedencia, su apellido o su apariencia no es la mejor manera para actuar contra el terrorismo. A tod@s nos fastidia que nos encasillen, recuerdo que hace muy poco, cuando le contaba un proyecto a una gran amiga, me tildó de “soñador y poco pragmático", mientras yo pensaba: “mi historia reciente demuestra todo lo contrario”, pero los estigmas de juventud se mantienen… imaginen que eso sea así en cada frontera, en cada avión, en cada tren.
En otra cuerda y sintetizando: Punset aboga porque no se tienda a controlar la red en extremos… todo se iría a la mierda y yo estoy con él. Ricky Martín confiesa su homosexualidad como un regalo. Silvio Rodríguez dice que en Cuba hay que cambiar muchas cosas… nunca es tarde si la dicha es buena. Le Troks, la compañía de ballet de hombres, vuelve a España pero no a Madrid y es que desde que cerró el Teatro Albéniz la programación de danza de la capital se ha afectado considerablemente. El Ballet Nacional de Cuba estuvo en Londres y las críticas fueron muy buenas. Yo he ido al teatro y al cine pero lo comentaré en otro Viernes.
Os quiero,
Ed.